El IVA y un empleo al alza impulsan a Gipuzkoa a batir un nuevo récord de recaudación

Las arcas forales ingresan hasta mayo 1.751 millones, un 6,2% anual más por unos precios que siguen altos y las retenciones de trabajo ligadas a la fortaleza laboral.

La inflación y la incesante escalada de precios se ha convertido en el 'leitmotiv' de muchas conversaciones económicas. Se da la circunstancia de que mientras los bolsillos de los contribuyentes tienen cada vez menos efectivo, la Hacienda foral llena sus arcas gracias al tributo que grava el consumo y a las retenciones por trabajo (IRPF). En los cinco primeros meses del año los ingresos de Gipuzkoa se han disparado hasta los 1.751 millones de euros tras crecer un 6,2% interanual, y han elevado la cifra recaudatoria a unos guarismos nunca antes vistos a estas alturas del año.

El IVA, protagonista de la recaudación, viene impulsado por unos precios que poco a poco van moderándose (el IPC general ha cerrado mayo en el 3,2%, siete puntos menos que en junio de 2022), aunque la cesta de la compra en Euskadi cuesta hoy un 11,6% más que hace un año. Así, la recaudación por este tributo ha aumentado un 13,3%, hasta los 580,6 millones, 69 más que en el mismo periodo del año pasado, cuando la inflación tocó techo a mediados de año con un sorprendente 10,2%.

En lo que respecta a los productos que más han visto aumentar su precio en la cesta de la compra en los últimos doce meses, el azúcar sigue siendo el alimento que más se ha encarecido, con un 62,5%. Eso sí, modera casi cuatro puntos el aumento de su precio con respecto a abril, cuando se apuntó una subida del 66,3%. La leche sigue disparada (25,6%), pero también apunta una relajación en su precio con respecto a abril. Así las cosas, es difícil que el Gobierno de Pedro Sánchez opte por acabar con la rebaja del IVA en productos concretos que implementó a comienzos de año y que caduca, en principio, el 30 de este mes, ya que ello significaría un nuevo alza de este índice que parece que comienza a moderarse. La eliminación del IVA del 4% que se aplica a todos los alimentos de primera necesidad, entre ellos el pan o la leche, y la rebaja del 10% al 5% el del aceite y la pasta, no parece haber mermado la recaudación del territorio por este tributo.

Estas cifras en verde que arroja el impuesto directamente relacionado con el consumo (IVA) se explican por el aumento de los ingresos íntegros, que se han elevado un 11,2%, mientras que las devoluciones caen un 17% después de que a cierre del año pasado esta partida aumentase un 30,1% con el objetivo de que Hacienda insuflase liquidez al tejido económico del territorio ante el complicado momento que atravesó la economía en un momento con muchas incertidumbres.

Una parte importante de este récord recaudatorio hasta mayo se debe a la inflación, pero no toda. La evolución al alza de los ingresos por IRPF y en concreto por el aumento de las retenciones por trabajo refleja la buena marcha del empleo. Y es que Gipuzkoa marcó en mayo su tercer récord consecutivo de afiliación y llegó a los 334.403 cotizantes. La recaudación líquida por este impuesto ha sido de 887,6 millones, un 8,6% más que en los primeros cinco meses del año pasado. Aun así, el incremento del total del IRPF es menor, ya que sube tan solo un 2,5% respecto al año pasado a consecuencia de la actual campaña de la Renta que finaliza este próximo día 30.

Las medidas antiinflación aprobadas el año pasado por las tres diputaciones forales para ayudar a familias, autónomos, pequeñas empresas y otros sectores vulnerables en plena escalada de la inflación es la razón principal que explica que el crecimiento del IRPF sea solo leve. La actuación estrella en el año fiscal 2022 ha sido la deflactación del 5,5% en todos los tramos del IRPF, acompañada por una deducción especial de 200 euros a rentas inferiores a 35.000 euros. El impacto de estas medidas para las arcas forales supondrá 119 millones de euros. Además, la campaña de la Renta dejará así un nuevo récord de devoluciones, con un total de 291.000 propuestas (32.852 más que en el ejercicio precedente), y un importe medio que también alcanza un máximo histórico de 1.166 euros de media a devolver por parte de Hacienda a más de siete de cada diez guipuzcoanos (72,8%).

Impuestos especiales

Los impuestos especiales o indirectos más vinculados al consumo también han subido considerablemente. Destaca el incremento de las tasas recaudadas por hidrocarburos, el tercer tributo que más aporta a las arcas forales. La eliminación desde diciembre de la bonificación de 20 céntimos por litro de combustible –aunque se ha mantenido para el transporte y actividades ligadas al sector primario– no parece haber limitado el consumo de carburante entre los conductores guipuzcoanos. Todo lo contrario.

Las estaciones de servicio del territorio han registrado un aumento de ventas de combustible (gasolina sin plomo 95 y diésel) en el primer trimestre del año (+7,7%), tras la imprevista bajada del precio de los carburantes, lo que ha llevado al fisco guipuzcoano a recaudar 121,3 millones por este impuesto, un 9,3% más que en los primeros cinco meses de 2022.

Fuente: El Diario Vasco.